15 dic 2013

Ser entrenador

A veces cometemos el error de simplificar la tarea del entrenador en “escoger a once jugadores” sin tener en cuenta que en realidad existen muchas variables que deberíamos considerar. Evidentemente el juego del equipo y los resultados, que suelen mandar a la hora de las decisiones, recaen bajo los hombros del entrenador. Si un equipo no juega bien, comete muchos errores, etc., o si los resultados no se dan, con muchas caídas o sin llegar a las victorias, el entrenador queda automáticamente en el ojo de la tormenta.

A pesar de esto, que sería lo más visible, hay otras cosas que entran en juego y que me parece importante tenerlas en cuenta. En primer lugar, hay que destacar que el entrenador no trabaja solo. Su trabajo depende, en buena medida, de la relación que mantenga con los futbolistas. Al fin y al cabo, a la hora de la verdad, los que juegan son los futbolistas, no los entrenadores; los que deciden cómo ejecutar una acción, pasársela a “x” o “y” son los futbolistas, y así con un montón de acciones donde son ellos los encargados de elegir dentro del campo. ¿El entrenador influye en esas cosas de manera directa? Bajo mi punto de vista, no. Puede pedirle al lateral que suba con más frecuencia, pero lo que haga ese jugador cuando le llegue la pelota ya escapa de sus peticiones. La decisión de que ese futbolista juegue o no sí depende únicamente del entrenador, en ese sentido, sí es responsable.

En segundo lugar, no basta con escoger once jugadores para que el equipo sea competitivo, se asocie o no cometa errores. Estamos errados si vemos a los futbolistas como piezas de puzles que, escogiendo las correctas, calzarán a la perfección. Y aquí, en el hecho de conformar un buen equipo o, de manera más amplia, un buen plantel, entran en juego sus habilidades para saber lo que tiene, sus virtudes, qué es lo que falta, sus carencias; también su visión para saber fichar (algo que no es tan simple si vamos a lugares donde no puede comprarse lo mejor del mundo y los rendimientos futuros resultan una incógnita). También sería importante su liderazgo, su poder para motivar, para transmitirles a los futbolistas sus creencias futbolistas, darle la seguridad (con convicción) de que lo que se hace es la mejor manera.

Sin dudas, y en todos los ámbitos de la vida, también entra en juego, y debería destacarse, la calidad de persona. Cuando un entrenador es claro, preciso, les explica a los jugadores cómo son las cosas según él, quién estará en el equipo o quién deberá buscarse otro, me parece que suma puntos. Cuando es sensato, cuando dice lo que cree, cuando no sobrevalora la actuación de los suyos y admite errores, procurando trabajar en ellos, sigue sumando puntos. No hablo de puntos en la tabla de posiciones, hablo a la hora de mantener cierto equilibrio a nivel institucional, da otra seriedad. Está claro que con esto sólo, sin tener todo lo anterior, posiblemente no se llegue a demasiado lejos.

Pero no hay que distinguir entre blanco o negro, entre entrenadores que tienen todo de una cosa y nada de otra. Ni tampoco crucificar a un entrenador porque no le hayan salido las cosas en un sitio, porque pueden salirles en otro. Depende, también, del contexto y las exigencias (que a veces resultan inmediatas y otras veces se realizan sobre plazos largos y estables).

Hoy perdimos el campeonato corto de una manera increíble y Rodolfo Arruabarrena decidió dar un paso al costado. El “Vasco”, en toda su estadía con Nacional, sólo pudo darle su impronta al equipo de manera fugaz en algunos partidos. En líneas generales, Nacional no tuvo una manera de jugar. Posiblemente faltó identidad en el equipo, la fortaleza para afrontar los momentos complicados, de parte del entrenador y los futbolistas. A pesar de esto, a pesar de que Arruabarrena es también responsable (y sabemos que él es el primero que lo sabe), es un tipo que se ganó mi aprecio por cómo es, por lo que intentó estando en Nacional y por su manera de hacer las cosas.

A veces se gana y a veces se pierde (no es un consuelo, la realidad es así), y hoy no me gustó cómo se perdió. Pero a pesar de esto y todo lo demás, agradezco todas las actitudes que tuvo Arruabarrena y cómo defendió al club mientras fue su entrenador. Gracias, “Vasco”.


14 dic 2013

Decanato del fútbol uruguayo

Estas fechas siempre son sinónimo de polémica, de dudas, de cosas poco claras. Los argumentos de una postura (Peñarol) recaen en acciones de la otra (sin reconocer que dichas acciones pudieron estar equivocadas); mientras tanto, los argumentos de esa otra postura (Nacional) intentan ir un poco más allá, basándose en documentación claramente oficial.

Esto último quedará constatado en el video, con imágenes de dichos documentos y en palabras de Juan José Melos y Hernán Navascuez.


Me parece un tema importante para todo aquel que le guste el fútbol y respete la historia. Obviamente, si estás en Uruguay posiblemente este tema te interese más que si no lo estás. Lo que no deja de ser curioso es ver a periodistas, sobre todo, intentar minimizar esta discusión. ¿Prefieren tapar la verdad y seguir defendiendo una situación poco clara o, lisa y llanamente, una mentira? Curioso.

Esto es todo por hoy.

12 dic 2013

Decepción italiana


Este miércoles finalizó la última jornada de la fase de grupos de la UEFA Champions League 2013/14. Los dieciséis equipos que pasarán a los enfrentamientos directos sabrán sus respectivos rivales el próximo lunes. Entre ellos se destaca la presencia de los cuatro combinados ingleses y alemanes; completan la lista tres españoles, un francés, un turco, un ruso y un italiano. Destaco la presencia de los equipos de los primeros dos países porque pasaron todos los que participaron.

Incluso puede apreciarse como la otra liga fuerte de Europa, España, quien también cuenta con cuatro participantes, tuvo una buena primera fase: Barcelona, Real Madrid y Atlético de Madrid avanzaron. Los tres equipos antes mencionados fueron líderes de sus respectivos grupos, dominando cada zona con propiedad, distanciándose sensiblemente de sus rivales.

El caso bastante llamativo es el de Italia. Ese país tiene tres participantes en la fase de grupos cuando hace un par de temporadas (hasta la 2011-2012) tenía cuatro. La pérdida de una plaza se debe a los malos resultados que han arrojado en los últimos años los equipos italianos en la máxima competición en contraste a los buenos rendimientos de los equipos alemanes. No cabe dudas de que la UEFA acertó en el cambio: los cuatro alemanes en esta edición han avanzado mientras que sólo un italiano de tres logró lo mismo.

A pesar de esta tendencia, de la caída de la liga italiana, esta temporada de la UEFA Champions League había hecho soñar sobre todo a un equipo italiano: Juventus. Se trataba del último campeón de aquel país y que en la edición pasada había llegado a los cuartos de final, cayendo con el campeón Bayern Múnich con igual resultado de 2 a 0 en ambos juegos. Sorprende el hecho de que no haya entrado entre los dos mejores equipos en su grupo, ya que Galatasaray le “robó” su puesto. Sin dudas es otro golpe para los italianos.

El equipo napolitano tampoco pudo avanzar de ronda, aunque en su caso fue distinto. No contaba con la responsabilidad de Juventus y su grupo era realmente complicado. Basta con decir que tanto ellos como Borussia Dortmund y Arsenal terminaron empatados en puntos, es decir con doce. Cerró ese grupo, con un sorpresivo cero puntos, el Marsella de Francia. Napoli estuvo allí, cerca, más cerca que Juventus.

El tercer italiano que había llegado a la Champions es el AC Milan, quien clasificó en la última fecha tras empatar 0 a 0 con Ajax. Los rossoneros pasaron como segundos de su grupo, con un punto más que los holandeses. Para la grandeza de este equipo y sus logros a lo largo de su historia, la campaña puede tildarse como pobre. Es más, desde hace un par de temporadas (por no decir alguna más), Milan no está en los primeros planos como candidato firme para conquistar Europa una vez más. Y eso es preocupante no sólo para ellos, también para Italia en general.

El último logro considerable de los italianos es la conquista de Inter de Milán en 2010 ganándole en la final a Bayern Múnich. Pero desde esa edición ningún conjunto italiano (ni Inter, Milan o Juventus) ha superado la barrera de los cuartos de final. Esto último es equivalente a decir que no han llegado hasta semifinales, al menos, desde el año en que Inter fue campeón. Esta temporada no parece que haya grandes novedades, Milan no está a la altura de equipos como Bayern Múnich, Real Madrid, Barcelona, Borussia Dortmund, PSG o Arsenal (por nombrar los que considero principales). Debido a lo anterior, sólo por “suerte” en el sorteo podría llegar a una ronda más o una ronda menos, pero no veo grandes opciones de que llegue lejos como a semifinales.

Mientras alemanes, ingleses y españoles se fortalecen, los italianos se debilitan, agudizando esa ‘decepción italiana’ que se ha agravado en los últimos años.


11 dic 2013

Sensaciones mundialistas


No debe de haber cosa más maravillosa, deportivamente hablando, que participar en un mundial de fútbol. Es una sensación única saber que tu selección estará entre los treinta y dos competidores, que tendrá la chance de jugar en el mismo torneo junto a las selecciones más grandes del mundo. Ya pasa a segundo plano a dónde se pueda llegar, qué se pueda conseguir y con quién toque, de manera particular, enfrentarse partido a partido. Ya el hecho de estar es importante porque hay muchos que quieren llegar, al igual que uno, pero que se quedan afuera.

Las eliminatorias —o las clasificatorias, como le llaman en otros sitios— suelen durar más de dos años. En ellas los países de cada confederación luchan por grabar su nombre en la próxima Copa del Mundo. Esta vez toca en Brasil, al igual que en 1950; y por ser Brasil tiene algo de especial, ya que se trata del país que más mundiales ganados tiene (un total de cinco) de lo que va de la historia. Es uno de los países más futboleros del mundo, desde siempre; país que suele estar entre los candidatos para llegar a las instancias decisivas.

El mundial se disputará el año que viene, dentro de siete meses. Pero hoy no quiero hablarles ni dar demasiados detalles de lo que será la Copa del Mundo, ni hablar de las sedes ni extenderme demasiado en los equipos; hoy quería comentar la sensación que genera el sorteo ya realizado hace unos días. Hay personas que dicen que la competencia comienza el mismo día en que se saben los grupos, en que se saben los primeros tres rivales de cada selección nacional. Y eso, creo yo, tiene algo de cierto. No es lo mismo no saber a saber los rivales y, además, los posibles cruces, haciendo conjeturas, en rondas venideras.

Sin dudas este sorteo mundialista iba a ser especial, habían cuatro equipos sudamericanos y cuatro europeos como cabezas de serie. También existía la novedad de que uno de los europeos (de los nueve restantes, sin contar los primeros cuatro del Ranking FIFA) iba a agruparse al bombo dos, en donde estaban los países africanos y los dos restantes de Sudamérica (Chile y Ecuador). Este país finalmente fue Italia, lo cual no era demasiado alentador para las cabezas de serie de nuestro continente; posiblemente Italia y Holanda eran las dos peores opciones, en el orden que uno elija.

Sin entrar en grandes detalles, quiero darles la impresión que me dieron los grupos. Hay tres que considero sumamente duros, entre ellos el que lidera Uruguay. La Celeste tendrá que abrir el Mundial frente a Costa Rica (el rival más accesible, aparentemente), Inglaterra e Italia. Un optimista podría decir “si hubiese tocado Holanda e Italia, las cosas serían peores”, y creo lo mismo. Inglaterra es un país que tiene probablemente la mejor liga del mundo, pero sus jugadores no son grandes figuras en sus equipos, suelen no ser los “determinantes”. Es más factible ver, por ejemplo, franceses (y unos cuantos) en el Arsenal que a un par de ingleses alineando como titulares. Eso dice mucho. Por ello creo yo que Uruguay tiene posibilidades reales y muchas de poder imponerse ante los ingleses y conseguir una victoria que sería más que importante pensando en la clasificación.

Italia es una selección dura. Es otro país que tiene una gran tradición futbolera y que suele estar, al margen de cómo juegue, en la definición. Parece que los italianos se preparan para los mundiales y suelen ir de menos a más, esto puede ser casualidad o no, pero es lo que generalmente ocurre. Si bien es cierto que esta nueva azzurra intenta otra propuesta futbolística, hay raíces que no cambian. Con esto último me refiero a su espíritu. Sería utópico creer que Italia dejará de lado ese alto nivel competitivo por competir (valga la redundancia) que lo ha caracterizado siempre.

Y hay otros dos grupos mundialistas en donde me gustaría detenerme. Uno de ellos es el que forman España, campeona del mundo, Holanda, subcampeona del mundo, Chile y Australia. España y Holanda no necesitan presentación, basta con ver las etiquetas antes dichas. Australia seguramente sea la cuarta selección sin verdaderas opciones como para soñar en una segunda ronda. Y Chile, bueno, la selección sudamericana, en un primer momento, podría haber lamentado su “mala suerte” por encontrarse con dos europeos verdaderamente fuertes. Pero debe ser consciente de que sus rivales también la consideran así, una selección que viene bien, creciendo y que será un competidor muy duro. Chile puede complicar y los chilenos pueden soñar.

Argentina, Brasil y Colombia, los otros tres cabezas de serie de Sudamérica, tienen grandes chances de clasificar. No voy a decir que de ojos cerrados, pero tienen la responsabilidad moral de hacerlo. Es más, me animaría a decir que Argentina y los locales deberían ser, sin mayores inconvenientes, los primeros de sus respectivos grupos. Colombia tiene material, mucho, diría yo, y es esta una oportunidad sin igual para redimirse de lo que ha sido su historia; tiene una gran selección, tiene armas como para hacer un gran Mundial. Veremos qué pasa con ellos. Y el último sudamericano que aún no he nombrado es Ecuador. Veo en ellos a una selección con serias posibilidades de avanzar. Los ecuatorianos han perdido a su máxima figura, al emblema de su selección, pero tienen argumentos como para clasificar a octavos de final.

El último grupo en el que quiero detenerme es el que encabeza Alemania. Ghana, vaya si los conocemos bien, Estados Unidos y el Portugal de CR7, junto a los mencionados alemanes, conforman, bajo mi punto de vista, el grupo más complejo del Mundial. Si bien es cierto que el rival que estaría un escalón por encima del resto es Alemania, los otros tres tienen serios y fuertes argumentos como para avanzar de ronda. Portugal tiene a Cristiano Ronaldo aunque probablemente no sea de las grandes selecciones europeas, pero no será fácil enfrentarla. Subestimar a los africanos sería un acto insensato, más con el calor que habrá y su potencia física. Ellos son durísimos y en Uruguay lo sabemos bien. Y por último tenemos a Estados Unidos: la mejor selección de la CONCACAF. Su fútbol interno ha ido en ascenso aunque aún está lejos de la elite. Tiene figuras interesantes en Europa, o las ha tenido en las últimas temporadas, y suele conformar un trabajo en equipo bastante sólido, lo que le permite competir ante grandes selecciones.

Probablemente la Copa del Mundo de la FIFA Brasil 2014 ya esté en juego y nosotros no lo veamos correctamente. Los grupos ya están definidos, aunque hayan existido dudas y controversias en torno al desarrollo del sorteo, y sólo resta que llegue el nuevo año, el mes indicado, el día de inicio y la hora señalada, para que el mundo esté atento para el inicio del evento mundialista.

Esto ha sido todo por hoy, hasta la próxima.


4 dic 2013

Suárez por cuatro


En estos últimos días han aparecido muchos temas de los cuales sería interesante dedicarle algunas palabras. La integración de los cuatro bombos mundialistas con algunas sorpresas, el sorteo del próximo viernes, los resultados de las pruebas PISA 2012 o la vuelta de Nacional a la punta del Apertura son tan solo algunos, y seguramente podría seguir con otros. De hecho, de lo que quiero hablar hoy es de un tema diferente de los mencionados anteriormente, de algo a lo que hace casi un año atrás le dediqué una entrada y que hoy, tras una actuación descollante en un terreno de juego, definitivamente merece otra.

Luis Suárez. Ese delantero uruguayo de veintiséis años que defiende la camiseta roja del Liverpool de Inglaterra, probablemente la de más historia de aquel país. Historia con la que Suárez coquetea y muy de cerca, porque, siendo sinceros, la actualidad del equipo de Anfield dista mucho de los logros a lo largo de su historia. Pero el uruguayo es otro cantar, es de otra categoría; no podemos hablar de Liverpool sin mencionarlo y tal vez sí podríamos hablar de él olvidándonos del equipo. Sus actuaciones, en especial la de hoy, son simplemente para admirarlas, para disfrutarlas, para disfrutar del fútbol, de su fútbol.

Luisito alcanzó hoy la punta en la tabla de goleadores de la English Premier League, habiendo dado cierta ventaja en cuanto al número de partidos, ya que se perdió las fechas de inicio de la temporada por la sanción que acarreaba de la anterior. Además, hoy rompió un récord de esos que dan para pensar: fue la tercera vez que le hizo un hat-trick (aunque metió cuatro goles en realidad) al mismo equipo; Norwich recibió diez goles del salteño en cuatro partidos, una marca impresionante.

Pero sería injusto si solo dijera que hizo cuatro goles hoy, aunque esto ya de por sí sea mucho, porque cada uno de los goles tuvo algo de especial. Y cuando digo especial me refiero a que fueron goles que no se ven todos los días, diría que fueron golazos e, incluso, temo quedarme corto, en especial con el tercero. Para colmo, cuando el partido ya estaba 4 a 1, tras convertir sus goles, Suárez asiste a un compañero para poner el quinto. Encima eso.

Ya no solo puede describírselo como un futbolista con ambición, con sed de ganar, con muchas ganas y empuje, que va a todas. Eso es cierto, sin embargo, hay más. Estas cualidades no pueden explicar los rendimientos que ha ido desarrollando de forma creciente desde que está en Europa o, mismo, desde que la está rompiendo en Liverpool. El talento de Suárez es único. Lee las cosas antes de que pasen, anticipa en todo el sentido de la palabra, está siempre dos segundos más rápido que los demás; no baila en el césped como lo hace por ejemplo Iniesta, hasta parece trastabillar cuando conduce, pero es una luz, se mueve con rapidez, tiene una fuerza explosiva que da miedo.

Y cuando está derecho, está derecho. Ya lo sabe la selección de Chile, a la cual le hizo cuatro goles en el Centenario en la pasada Eliminatoria. Hoy fue una réplica de aquello en cuanto a la precisión, cada tiro era medio gol, tenía olor a gol. Así fue en sus dos remates desde fuera del área, uno un tremendo disparo y el otro también pero tras una acción previa exquisita, digna de unos pocos; en el segundo tanto, donde pateó de zurda en el corazón del área chica; o en su cuarto tanto, tras efectuar un tiro libre con una curva y una precisión perfectas.

Los compañeros de Luis Suárez ya lo saben, incluido Gerrard, quien le cedió la mayoría de los tiros libres, hay que seguirlo a él, al hombre sudamericano, al que con sus rendimientos descollantes gana partidos; hay que acompañarlo, intentar dársela en todo momento, que él, esté donde esté, va a inventarse algo, ya sea en acción individual o en una descarga que terminará, segundos más tarde, con la culminación en sus pies. Ese es Suárez, y Liverpool lo necesita. Sin él, sería un equipo triste de mitad de tabla. Con él, bueno, puede darse el lujo de estar en los primeros puestos de la liga inglesa.


Primera entrada en donde hablo de Luis Suárez: Influencia Suárez.

Compacto del partido de hoy: Liverpool 5-1 Norwich.

28 nov 2013

Se viene el Mundial de Clubes 2013



El 11 de diciembre del presente año comenzará a disputarse la competición más importante del mundo a nivel de clubes, la que reúne a los grandes campeones de los diferentes continentes: la Copa Mundial de Clubes de la FIFA 2013. La novedad más llamativa de esta edición es el cambio del país organizador, ya que Marruecos será el encargado.

Marruecos tendrá su propio representante por ser la tierra organizadora; Raja Club Athletic es el último campeón de aquel país y por eso se ha ganado ese derecho. Es comúnmente conocido como Raja Casablanca.

Por el continente africano aparece el equipo egipcio que últimamente monopoliza ese sitio privilegiado: Al Ahly. Ha ganado durante su extensa historia de 106 años ocho veces la Liga de Campeones de África, además de ser el vigente bicampeón de la competición. Fue considerado por la Confederación Africana de Fútbol como el “club africano del siglo”, distinción que se ganó por ser el más laureado de su continente durante el Siglo XX.

Dirigiéndonos al norte nos encontramos con el viejo continente. Por parte de Europa el participante será Bayern Múnich. El equipo de Baviera será el primer alemán en disputar el Mundial de Clubes, a pesar de tener en sus vitrinas dos Copas Intercontinentales (1976 y 2001). De la manera en que ganó la pasada UEFA Champions League, y de la manera en que está disputando la actual, Bayern Múnich es sin dudas el máximo candidato para llegar a la final y ganarla.

El campeón de la última Copa Libertadores de América, Atlético Mineiro, será el representante de CONMEBOL. El equipo oriundo de Belo Horizonte está disputando por primera vez un torneo a nivel mundial en sus 105 años de existencia. En 1950 realizó una gira por Europa, yendo incluso a la ciudad de Múnich, donde se enfrentó al TSV 1860 München (venció 4 a 3), vecino y rival del Bayern Múnich. Es el otro candidato “fuerte” que tiene la competencia, el otro equipo que tiene grandes chances de encontrarse en la final.

Un equipo de México será el que representará a la CONCACAF. El Club de Fútbol Monterrey, conocidos como los rayados, ya tiene una importante experiencia disputando la competencia. Monterrey ha ganado las últimas tres ediciones de la Champions League de Centro y Norteamérica, eso explica su pronunciada y reiterada participación en el Mundial de Clubes. Su mejor participación es la del año pasado, siendo tercero tras vencer a Al Ahly.

Por el continente asiático estará Guangzhou Evergrande. Se trata de un equipo de China que en los últimos años ha invertido fuertemente para tener un nivel decente y conquistar Asia. Tras una serie de frustraciones en los años recientes, el conjunto chino logró consagrarse como campeón de la Liga de Campeones de Asia. Es posible que su participación no pase desapercibida en el Mundial de Clubes, ya que la competencia para llegar a él ante rivales japoneses y surcoreanos, entre otros, es sumamente alta.

El séptimo y último equipo de la edición 2013 del Mundial de Clubes viene desde Oceanía, más precisamente desde Nueva Zelanda. Su nombre es Auckland City y ésta es su quinta participación. Es el vigente tricampeón de su continente. Recordemos que desde que Australia compite en el continente asiático, el fútbol neozelandés es el abanderado de Oceanía. Las continuas participaciones de Auckland City abalan esto último, aunque incluso ante australianos ya había llegado a la competición de nivel mundial.

La final está fijada para el 21 de diciembre y se disputará en el estadio Marrakech. Es muy probable que Bayern Múnich llegue a esta última instancia y se consagre campeón, es el más fuerte de los siete, al menos a priori. Los otros equipos, como Atlético Mineiro y Monterrey (podríamos incluir al conjunto asiático o africano), tendrán la oportunidad de medirse ante, probablemente, el equipo más poderoso del mundo.


23 nov 2013

La frase: el Aprendizaje

Les voy a contar una pequeña historia que da vida a esta entrada, de esas que ocurren de casualidad. Hace unos meses, no recuerdo con exactitud cuántos, pero sé que más de uno o tal vez dos, estuve discutiendo conmigo mismo las carreras universitarias que me llamaban la atención y por qué elegí la que elegí y no esas otras —que tampoco eran muchas— que parecían interesantes.

Entre esas otras que no elegí se encontraba Arquitectura. Siendo sensato, creo que no es como para mí porque evidentemente se necesita cierta habilidad para dibujar, cosa que me gustaría aprender pero en realidad no sé, soy bastante malo; también he visto que suelen hacer muchas maquetas, y tampoco se me daría demasiado esto. Tal vez lo que me resulte más llamativo sea los trabajos por computadora, utilizando los programas que hacen diseños, maquetas en 3D, etc.

Sin profundizar más en lo anterior, les cuento que ingresé a la página oficial de la Facultad de Arquitectura y anduve investigando las carreras, los distintos planes de estudio, los ciclos, las asignaturas, etc. No sabría explicarles cómo, ya que no recuerdo adonde fui exactamente, pero en un archivo que descargué, prezi para ser más preciso, encontré una frase que llamó mi atención y me gustó bastante. En base a esa frase, acerca del aprendizaje, hice una pequeña imagen.


El autor de la frase es Herbert Alexander Simon, economista, politólogo y teórico de las ciencias sociales. Nació en Milwaukee, Estados Unidos, el 15 de junio de 1916. En 1978 ganó el Premio Nobel de Economía por ser «uno de los investigadores más importantes en el terreno interdisciplinario» y «porque su trabajo ha contribuido a racionalizar el proceso de toma de decisiones». Fallece el 9 de febrero de 2001. Admito que el perfil de este norteamericano, al haber leído un poco acerca de él, me agrada.

Volviendo a la frase en sí, me parece útil recordarla de vez en cuando, sobre todo cuando nos encontramos atareados, abrumados, o no sabemos por dónde empezar para estudiar o cómo encarar la cuestión. El hacer es necesario y el pensar, bajo mi punto de vista, es lo fundamental. Combinando ambas cosas llegamos a lo buscado: el aprendizaje.

18 nov 2013

¡Cómo les duele!


No está bueno generalizar, y no es mi idea hacerlo, hoy y aquí, pero no caben dudas de que a unos cuantos les duele. Les duele ver que Nacional a nivel institución se haya estabilizado del presunto caos del cual ellos hacían un mayor eco; les duele ver a Nacional sólido en la tabla de posiciones, en el juego partido a partido, donde le buscan hasta la quinta pata al gato para concluir en sus “profundos” análisis que el tricolor comete errores, que sus futbolistas están mal, o que el rival jugó mal y por ello los trámites se dan como se dan. Para colmo en la otra esquina están bastante jodidos.

Y ahora, a una semana del partido más importante del fútbol uruguayo, intentan hacer una especie de campaña que confunde a distraídos. Intentan desprestigiar al entrenador Arruabarrena, quien, sin temor a equivocarme, en el acierto o en el error en cuanto a una decisión (por ejemplo, un cambio durante un partido), toma decisiones coherentes y, si algo no le gusta y salen las cosas mal, es el primero en reconocerlo públicamente y no hacer un teatro para las masas.

Les duele también eso. El perfil de Arruabarrena. Desde que llegó a Nacional, el entrenador argentino, al menos bajo mi punto de vista, se ha comportado diez puntos. Se ha manejado así. Incluso en las controvertidas decisiones (sobre todo, y una vez más aquí aparece la prensa, para alimentar esas presuntas controversias), el Vasco fue de frente, fue sensato y lo que dijo, lo hizo. No le tembló el pulso para decirle a Alejandro Lembo que ya no podía jugar más (o que no podía seguir en Nacional), tampoco con Abreu o Medina, a quien les dejó más que en claro que antes de ellos habría otros compañeros del plantel que serían tomados en cuenta como prioridad. Esto último fue más tela para los periodistas.

Recuerdo cómo salieron a decir “los dirigentes se lavan las manos, traen a Arruabarrena para que haga LIMPIEZA en el plantel de Nacional, y si pierde unos partidos, lo echan y listo”. Pero como siempre ocurre cuando NO ocurre lo que ellos creen, son los propios periodistas los que se lavan las manos: “no, jamás dije eso.” Para lástima de ellos, o mejor dicho, para suerte nuestra, siempre hay grabaciones que desenmascaran a los hipócritas.

¿Y por qué esta entrada? Porque como en el último partido, en donde Nacional gana con tres goles de Iván Alonso y uno de Alexander Medina, el Vasco recurre al ‘Cacique’ por primera vez en el Apertura, los tejidos de la prensa comienzan a nacer. “Quinta o sexta opción”, había dicho el entrenador. Y así fue. Iván Alonso es inamovible, pero Nacional utiliza dos delanteros; Porta estaba lesionado, Cavallini tuvo su oportunidad desde el vamos y no pudo repetir lo hecho cuando entraba desde el banco; Juan Cruz Mascia, el último en tener la oportunidad de ser titular, no llenó del todo el ojo (aunque, al menos para mí, hizo las cosas bastante bien); y el Morro García, que en sus últimos minutos se lo veía lejos de su nivel óptimo. Todas esas circunstancias ameritaban el regreso de Medina. Tal vez pocos o nadie lo esperaba, pero visto lo sucedido, al margen del gol, fue un acierto del DT darle esa oportunidad.

Por los minutos que jugó en Melo, noté que Alexander Medina se quedó en Nacional para lucharla, a pesar de no ser de las primeras alternativas, y sumar al equipo. No sé si todos lo verán así, pero me dio satisfacción. Además, dentro de lo que cabe, lo vi bastante bien con la pelota. Evidentemente el confiaba en que alguna oportunidad iba a tener. La tuvo y la aprovechó.

Y Arruabarrena volvió, una vez más, a callar varias bocas, o provocar que de esas bocas salieran nuevas excusas para seguir ensuciando la cancha. Les duele que diga que Nacional jugó mal cuando jugó mal, y que debe mejorar aunque gane; les duele porque en la vereda de enfrente hay un tipo que lo único que hace es vender cosas que no hay (y además algunos hinchas ingenuos han de comprar, pobres ellos). Les duele, y de manera doble, porque el equipo que iba a pelear un torneo internacional con chances de ganarlo, para los periodistas así se había armado, está realizando una penosa campaña a nivel local habiendo quedado fuera en primera ronda. Y sí, la alerta naranja es peligrosa, aquí en Uruguay como en Chile y Sud América. Lo siento, debía decirlo.

¿Y qué más? Eso: ¡cómo les duele!

10 nov 2013

La historia del Seattle Sounders


En el año 2009 llegó a la MLS, liga estadounidense de fútbol, un nuevo equipo de expansión: Seattle Sounders FC. Este equipo cuenta con varias particularidades; entre ellas destaca una hinchada bastante enérgica que lo acompaña siempre cuando disputa los encuentros en su estadio. Esta fuerte fidelidad no se construyó en los cinco años desde que los Sounders llegaron a la principal liga de su país, y para entenderla es necesario conocer los verdaderos orígenes de este equipo de la ciudad de Seattle.


Inicio en la NASL

El “primer” Seattle Sounders fue fundado el 23 de enero de 1974. Se trató de un equipo profesional de la North American Soccer League (NASL) oriundo de la portuaria Seattle en el estado de Washington. Las actuaciones más destacables fueron las dos llegadas al Soccer Bowl (similar a la actual final de la Copa de la MLS), en donde enfrentó al New York Cosmos en ambas ocasiones y fue derrotado; los resultados fueron: 2 a 1 en 1977 y 1 a 0 en 1982.

Un año más tarde de su segunda Soccer Bowl disputada, Seattle Sounders se disuelve. Esto ocurre a pesar de las multitudes impresionantes que lo acompañaban y a los sólidos resultados logrados en las últimas temporadas; el estado crítico de la liga, que había entrado en decadencia, fue crucial para el quiebre.

(*) La NASL fue disuelta en 1985, siendo en el año 1984 su última temporada.


El regreso de 1994

El equipo de la ciudad esmeralda volvía a la acción en el año 1994, siendo un nuevo club pero manteniendo de cierta manera la esencia de su antepasado (mismo nombre, por ejemplo). Esta vez era en la American Professional Soccer League donde competía. Vale destacar que desde 1997 cambió una vez más de liga (pasó a la USL First Division) pero manteniéndose en activo y sin interrupciones.

Este segundo pasaje de quince años fue sumamente más exitoso que el anterior. Logró disputar varias veces las etapas finales y se consagró cuatro veces como campeón de los playoffs (1995, 1996, 2005 y 2007). Además tiene en su haber una final perdida en el año 2004. Su última temporada en la USL fue en el año 2009, donde terminó eliminado en cuartos de final.

Seattle Sounders mantuvo una importante rivalidad con dos equipos de la liga: Portland Timbers (equipo ubicado al sur) y Vancouver Whitecaps (al norte, en Canadá). Los tres equipos disputan anualmente desde 2004 la Cascadia Cup —nace como iniciativa de los seguidores—, habiendo sido conquistada por los Sounders en 2006 y 2007. La particularidad extra de estos tres equipos es que actualmente se encuentran todos en la Major League Soccer; la rivalidad persiste.


Equipo expansión de la MLS

Desde la temporada 2007 se sabía que Seattle Sounders se uniría a la máxima competición del fútbol de Estados Unidos. Había sido galardonado como franquicia expansión: sería el decimoquinto equipo de la liga. Y lo más curioso es que el nombre podía haber cambiado (al ser una “nueva franquicia”, podía tener uno diferente al anterior); fueron los fanáticos quienes votaron por el nombre de Seattle Sounders FC, permitiendo así la continuidad de «su» equipo.

Evidentemente los fanáticos del Sounders son de los más destacados de la MLS. Gracias a ellos, el equipo se convirtió en el de más asistencia durante una temporada en los trece años que lleva la nueva liga.

Dentro de lo estrictamente deportivo, Seattle Sounders puede alardear de haber estado en Playoffs desde su primera temporada (desde 2009 que no se pierde un Playoffs, ya van cinco temporadas consecutivas). Lo cierto es que aún no ha llegado a conquistar la Copa de la MLS. Su mejor actuación en playoffs fue disputar la final de la Conferencia Oeste, cayendo ante Los Angeles Galaxy. Aunque sí ha ganado en tres ocasiones la US Open Cup (2009, 2010 y 2011).

En el plano internacional, ha disputado la Champions League de la CONCACAF en la temporada 2010/11, 2011/12 y 2012/2013 (las tres veces clasificó tras haber ganado la US Open Cup). En su última participación llegó a la ronda de semifinales, donde fue derrotado por el Santos Laguna de México.


Ahora podría entenderse un poco más por qué existe ese grado de fidelidad entre los seguidores y el Seattle Sounders. De por qué el equipo vestido de verde de la ciudad esmeralda suele llenar su estadio cuando juega de local, o por qué hay tanta rivalidad y son apasionantes los partidos frente al Portland Timbers. El equipo no nació realmente en 2009, sino hace ya casi cuarenta años atrás, en 1974.


9 nov 2013

Primo Levi, el niño y su relato


En Sobre el olvidado SIGLO XX, Tony Judt le dedica uno de sus capítulos al italiano Primo Levi. Este italiano nacido en Turín en el año 1919, es de origen judío y, por consiguiente, terminó siendo prisionero en un campo de concentración de los nazis. Para su suerte logró sobrevivir al Holocausto y se convirtió en el autor de memorias, relatos, poemas y novelas, muchas de ellas a modo desahogo para contar la experiencia que marcó su vida. Judt titula su capítulo como «Las verdades elementales de Primo Levi», destacando la manera concreta —sin dar rodeos ni florecer las cosas— que tenía el italiano de decir las cosas.

Tony Judt habla muy exhaustivamente acerca de este personaje, pero no es la idea de esta entrada hacer algo similar. Por el contrario, aquí pretendo sólo a modo de presentación, contarles algunos datos y, además, citar uno de sus poemas —que aparece en Sobre el olvidado SIGLO XX, antes mencionado— y también un relato que me parece bastante enriquecedor, que también aparece en la obra de Judt.

Antes de continuar, les cuento que Primo Levi, a pesar de las restricciones de la época por su origen judío, logró estudiar en la Universidad de Turín y graduarse como químico. Además consiguió trabajo en varias instituciones que, nuevamente, a pesar de su “raza”, estaban dispuestos a darle un lugar.

El poema que quiero compartirles se llama “El superviviente” (febrero de 1984), en italiano «Il superstite», donde puede verse de manera explícita su sentimiento de culpa por haber sobrevivido al Holocausto y no otras personas, que terminaron muriendo.
Retrocede, déjame solo, pueblo sumergido,
vete. No he desposeído a nadie,
no he usurpado el pan de nadie.
Nadie murió en mi lugar. Nadie.
Vuelve a tu bruma.
No es mi culpa si vivo y respiro,
como, bebo, duermo y me cubro con ropas.

Dice Tony Judt, citándolo textualmente del capítulo antes mencionado: “La culpa del superviviente —por sobrevivir, por no ser capaz de transmitir la profundidad de los sufrimientos ajenos, por no dedicar cada hora al testimonio y al recuerdo— es el legado triunfante de las SS, la razón por la que, en palabras de Nedo Fiano: «En el fondo, yo diría que nunca salí completamente del campo»”.

Las dos obras más reconocidas escritas por Primo Levi son Si esto es un hombre (considerada una las más importantes del siglo XX) y La tregua. Es justamente de esta última el relato que quiero compartirles. El relato es acerca de un niño de tan solo tres años que ha sobrevivido en Auschwitz hasta la llegada de los rusos. También se los comparto íntegramente, como aparece en Sobre el olvidado SIGLO XX.

Hurbinek no era nadie, un niño de la muerte, un niño de Auschwitz. Aparentaba unos tres años de edad, nadie sabía nada de él, no hablaba y no tenía nombre; ese extraño nombre, Hurbinek, se lo habíamos dado nosotros, quizá una de las mujeres que había interpretado con esas sílabas uno de los sonidos inarticulados que el niño emitía de vez en cuando. Estaba paralizado de la cintura para abajo, con las piernas atrofiadas, delgadas como palitos; pero sus ojos, perdidos en su rostro triangular y consumido, brillaban con una terrible viveza, llenos de exigencia y afirmación, de la voluntad de escapar, de romper la tumba de su silencio. Carecía de habla, pues nadie se había molestado en enseñarle; la necesidad de hablar cargaba su mirada fija de una urgencia explosiva: era una mirada salvaje y humana al mismo tiempo, incluso madura, un juicio que ninguno de nosotros podía soportar, tales eran su fuerza y su angustia… 
Durante la noche escuchábamos atentamente… del rincón de Hurbinek a veces venía un sonido, una palabra. No siempre era exactamente la misma palabra, pero sin duda era una palabra articulada, o, mejor, varias palabras articuladas con pequeñas diferencias, variaciones experimentales de un tema, de una raíz, quizá de un nombre. 
Hurbinek, que tenía tres años y quizá había nacido en Auschwitz y nunca vio un árbol; Hurbinek, que había luchado como un hombre, hasta el último aliento, por ganarse la entrada al mundo de los hombres, del que un poder bestial le había excluido; Hurbinek, el sin nombre, cuyo diminuto antebrazo —también el suyo— llevaba el tatuaje de Auschwitz; Hurbinek murió en los primeros días de marzo de 1945, libre pero no redimido. Nada ha quedado de él: su testimonio son estas palabras mías.

Este tipo de relatos conmueve y deja pensando. Me parecía que valía la pena compartirlo (por si no habían leído el libro o si no conocían a su autor).

Esta ha sido una entrada distinta a las anteriores en donde hablaba de libros. Aquí procuré centrarme en una personalidad, mencionada en un capítulo de un libro que ando leyendo, y destacar algunas cosas que me parece oportunas compartir. Y eso ha sido todo por hoy. Hasta la próxima.

8 nov 2013

Guerra Mundial Z

Me demoré unos cuatro meses en hablar de esta película. Por contratiempos u otros motivos, como temas que iban surgiendo en el momento y ameritaban algunas palabras, esta entrada fue retrasándose más y más. Pero al fin hoy me puse a pensar, y por suerte la recordé, así que acá vamos.



Guerra Mundial Z es un film estadounidense, cuya cara visible más famosa es sin dudas Brad Pitt, encarnando al protagonista Gerry Lane. Este actor, además de ser el destacado, también tuvo participación en la dirección. Me parece oportuno contarles que la película se basa, en esencia, en la novela homónima de Max Brooks, escritor y guionista estadounidense, pero se aleja bastante del libreto prescrito conforme pasan las escenas, sobre todo en el enfoque.

Por si quieren adentrarse un poco más en la novela, aquí les dejo una referencia.

Antes de entrar de lleno en lo que me agradó o no el film, quiero contarles que fue terminé viéndola de casualidad. Resulta que aquel día iban a dar El llanero solitario pero aún no llegaba a mi ciudad —ni al país—, por lo que debía elegir entre volver a mi casa o mirar “Guerra Mundial Z”, película que también tenía en carpeta. Al final, como podrán imaginar, compré la entrada en el momento y entré en la sala del cine esperando ansioso el inicio. Recuerdo, aún causándome un poco de gracia, que una mujer nos preguntó a mi primo y a mi “¡¿qué es lo que están dando?!”, ya que al parecer a ella no la alertaron del cambio. Creo que a pesar de ello terminó gustándole la película.

Creo que en líneas generales fue de lo que más disfruté en el presente año. Puede que haya sido importante el factor sorpresa, porque si bien tenía ganas de verla, no sabía exactamente por qué, por ejemplo, se llamaba como se llamaba. No sabía que iban a aparecer criaturas bastante desagradables llamadas zombis, aunque con ciertas particularidades, y que la acción se centrara en la lucha de la humanidad —que va sufriendo pérdidas importantes— frente a ellos.

La tensión comienza desde muy temprano; desde el embotellamiento de coches en una ciudad estadounidense. A partir de allí hay acción pero sobre todas las cosas tensión. La tensión, e insisto en este punto, es probablemente lo que provoque esas ganas de querer mirar por lo que se viene y no poder quitar los ojos de la pantalla. Te mantiene expectante, te sorprende en varios momentos, sin llegar, y quiero recalcarlo, al miedo. Miedo en sí no hay, sí sorpresa, y ésta hará saltar a más de uno en alguna escena.

Al término del film queda la sensación de que no es el final propiamente dicho. De que habrá una continuación, una segunda parte, otra película que continúe lo que no está terminado. Se encuentra un mecanismo, al menos provisorio, pero las ciudades, muchas de ellas, están devastadas, y el peligro no cesa.

Les comparto el argumento bastante resumido:
En Guerra Mundial Z, Gerry Lane es un antiguo agente de la ONU que se ve obligado a volver a la acción cuando una pandemia está convirtiendo a la población mundial en zombis. Ahora, deberá recorrer todo el planeta para encontrar una solución al conflicto antes de que todos los humanos perezcan.
hobbyconsolas.com

Aquí también dejo una crítica de la misma página.

Para mi gusto, Guerra Mundial Z y su alta dosis de tensión es una película altamente recomendable. De cine sé poco y nada pero, a pesar de ello, me gusta compartir (además de ir teniendo un registro propio) las películas que veo. Esta sin dudas la recomiendo, sobre todo porque disfruté viéndola.


5 nov 2013

Ley de ventaja


La ley de ventaja como tal no existe, pero sí son bastante claros los lineamientos que el árbitro debe considerar a la hora de “dar ventaja”. Para hablar del tema me parece oportuno citar textual las palabras del máximo organismo rector del fútbol: la FIFA.

En Reglas del juego iré específicamente a la Regla 5: Árbitros. Es aquí donde puede leerse el apartado de Aplicación de la ventaja. El mismo dice lo siguiente:

El árbitro podrá aplicar la ventaja siempre que se cometa una infracción. 
El árbitro deberá considerar las siguientes circunstancias para decidir si debe aplicar la ventaja o interrumpir el juego: 
• La gravedad de la infracción; si la infracción implica una expulsión, el árbitro deberá interrumpir el juego y expulsar al jugador, a menos que se presente una oportunidad subsiguiente de marcar un gol. 
• La posición en la que se cometió la infracción: cuanto más cerca de la meta adversaria, tanto más efectiva será la ventaja. 
• La oportunidad de un ataque inmediato y peligroso contra la meta adversaria. 
• El ambiente del partido. 
La decisión de sancionar la infracción original deberá tomarse en los siguientes segundos después de que ocurra. 
Si la infracción implica una amonestación, esta deberá imponerse durante la siguiente interrupción del juego. Sin embargo, a menos que exista una clara situación de ventaja, se recomienda que el árbitro interrumpa el juego y amoneste inmediatamente al jugador infractor. En caso de NO imponer la amonestación en la siguiente interrupción del juego, la tarjeta no podrá ser mostrada más tarde.

Tal vez se pregunten por qué he decidido hacer esta entrada hablando puntualmente de esta regla. Bueno, como alguien lo ha explicado mejor de lo que yo podría, prefiero volver a utilizar una cita.


(*) Aclaración: partido de fútbol entre Nacional (NAC) y Liverpool (LIV) por el Torneo Apertura de Uruguay.

“Minuto 84:32. Calzada (NAC) sufre una falta brutal por parte de Peña (LIV). Los jugadores paran, pero el juez manda seguir el juego. Viene el pase en profundidad, Bonjour (LIV) se tira al suelo, no alcanza la pelota y engancha a Iván Alonso (NAC). Falta clara, pero el árbitro la niega. Contragolpe, la TV muestra el replay y cuando vuelve la imagen en vivo, minuto 85:11, hay gol de Liverpool. En este momento, Cunha le muestra la segunda amarilla a Peña (LIV), lo que significa tarjeta roja.”
DECANO.COM

Lo que en particular le critico al árbitro del partido es el hecho de haber dado ventaja cuando en realidad debía parar el partido y expulsar al futbolista Peña de Liverpool. No hay más ventaja que dejar con 10 a un equipo si hay una infracción que amerite la expulsión. La pregunta que todos podemos hacernos es: ¿Qué hubiera pasado si Peña anotaba? Este jugador estuvo como un minuto dentro de la cancha cuando virtualmente debía estar fuera.

La consecución de acciones (el siga, siga, del árbitro, la falta no cobrada a Iván Alonso) deriva en gol de Liverpool (gran definición, por cierto, del pibe Aguirre). Es verdad que el gol (al menos de manera directa) no es producto del árbitro, pero si decimos que fue un error bastante grueso y que, como consecuencia, en la jugada siguiente hay un gol y ese gol es el que le da la victoria al equipo visitante (Liverpool termina ganando 2 a 1), sí podemos hablar de cierta influencia.

Reitero que con esto no pretendo justificar el resultado final, pero hay una realidad, el partido se encontraba 1 a 1, el trámite bastante parejo, y ese segundo gol de Liverpool llega tras una sucesión de acciones que desconciertan a todos los tricolores (hinchas, jugadores y al propio entrenador, que se salió de sus cabales). Y ese gol define el partido así como se dio.

Tenía previsto llamar a la entrada “Ley de desventaja” pero al final, como decidí poner textual la regla de la FIFA, opté por lo contrario.


Fuentes:


Nota referida: “¿Injusto con todos?” de decano.com http://www.decano.com/noticias/954/injusto-con-todos


3 nov 2013

Pensar el siglo XX

«El legado de un verdadero gran pensador.»
Evening Standard

Pensar el siglo XX es el primer libro de historia (o que se hable de historia) que leo de principio a fin por el mero gusto de hacerlo. Básicamente, se trata de un extenso diálogo entre Timothy Snyder y Tony Judt; el primero es quien tira los lineamientos de los temas a tratar y el segundo, quien los desarrolla.

Podría decirse que el libro es una biografía sobre Tony Judt, ya que va tocando todos los temas de su vida, desde su infancia hasta la actualidad (en ese momento, 2010). Pero a su vez, además de conocer la nacionalidad de sus padres, en qué centro estudió o dónde realizó los estudios universitarios de posgrado, entre otras cosas, veremos la visión de un tipo que se enfocó en conocer el siglo XX. Y esto también se verá en la extensa charla escrita, el desarrollo de temas como las Europas de posguerra —haciendo especial hincapié en Europa del Este, su especialidad—, su opinión acerca del Holocausto o Israel, además de mencionar a un montón de pensadores del siglo XIX y XX.

Evidentemente se tocan muchos temas durante el libro y mi memoria no es tan buena como la de este historiador, por lo que es muy probable que muchas cosas importantes no las haya dicho. Pero en resumen, puede verse la visión de Tony Judt acerca de lo más trascendental del siglo pasado (por ejemplo, cómo ve al estalinismo, el nazismo, etcétera) y también algunas menciones a los primeros años del nuevo siglo, donde habla de decisiones de Estados Unidos en el gobierno de Bush, por destacar algo.


Por si quieren profundizar un poco más acerca del libro, les dejaré la sinopsis de la editorial Taurus.

El siglo XX se erige como la edad de las ideas, un tiempo en el que, para bien o para mal, el pensamiento de unos pocos se impuso sobre las vidas de muchos. De una claridad y lucidez sin precedentes, el último libro de Tony Judt, uno de los más incisivos historiadores contemporáneos, está destinado a convertirse en un clásico del pensamiento moderno.

Pensar el siglo XX es a la vez un libro de historia, una biografía y un tratado de ética. Es una historia de las ideas políticas modernas en Occidente. Pero es también la biografía intelectual de Judt, nacido en Londres justo después del cataclismo que supusieron la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto, cuando el comunismo afianzaba su poder en Europa del Este.

La excepcional naturaleza de esta obra se revela en su propia estructura: una serie de conversaciones íntimas con su amigo el historiador Timothy Snyder en las que Judt, con asombrosa elocuencia y erudición, rescata a los pensadores que han dado forma al mundo en que vivimos, presentando sus triunfos y fracasos.

Es, por último, una reflexión sobre la necesidad de la perspectiva histórica y de las consideraciones morales en la transformación de nuestra sociedad. Al recuperar lo mejor de la vida intelectual del siglo XX, abre el camino a una moral para el siglo XXI. Este es un libro sobre el pasado pero es también un libro sobre la clase de futuro al que deberíamos aspirar.


Para ir terminando con la entrada, me parece oportuno destacar que esta obra es póstuma. Judt fallece en 2010 a causa de una enfermedad que le diagnostican en 2008 y va empeorando con el paso del tiempo. Además, que es la última obra publicada de una extensa cantidad, donde se destaca por ejemplo Postguerra: una historia de Europa desde 1945.

Les dejo un enlace en donde pueden conseguir el ebook: clic aquí.


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Novelas históricas que intentan narrar lo que fue el siglo XX:


Entradas de: Categoría Libros.


2 nov 2013

Trabajo y sacrificio

En estos tiempos no sorprende que al terminar un partido de fútbol los futbolistas que pierden hablen de trabajo y sacrificio para revertir una mala racha. Trabajo y sacrificio, esos dos conceptos que siempre sirven para motivarse y seguir, ¿pero en serio motivan o para qué se dicen? ¿Para dejar tranquilos a los hinchas?

Es evidente que en el fútbol profesional los futbolistas “trabajan” en esto; tienen la responsabilidad de entrenar, prácticamente a diario, medirse en ciertas cosas (como procurar no salir por las noches o cuidar la alimentación), y la remuneración que les corresponde es el salario (elevadísimo en los futbolistas top del mundo, aunque ese ya es otro tema).

Sin embargo, esos futbolistas (diría que todos, los top e incluso los que no llegan siquiera a ser profesionales) empezaron a jugar por amor al juego, porque simplemente les divertía. Sólo unos pocos tienen la suerte de poder dedicarse a esto, de entrenar de manera profesional y desarrollarse en la alta competencia.

Aún en esos casos, tras la derrota, el trabajo y el sacrificio se hacen presentes en las declaraciones. Nunca lo entenderé. ¿Se sacrifican? Se esfuerzan, o esa es la idea, ¿pero se sacrifican? Entiendo por sacrificio como algo que no quiero hacer o no me gusta pero de todos modos lo hago. Y el trabajo, “trabajar en la semana”, ¿acaso no sería más indicado decir ‘entrenar’?

La entrada quedó corta pero la idea era transmitir estas cosas. Muchas veces se ven malas decisiones de los futbolistas (en una acción determinada, en un partido) que no mejorarán por “trabajar” o “sacrificarse” como por empezar a pensar un poco más. Estaría bueno que hicieran eso.

Hasta la próxima.

26 oct 2013

Más allá de Nashama

El hecho de que Uruguay haya sido quinto en las Eliminatorias Sudamericanas hace que le toque jugar el repechaje ante un equipo asiático: Jordania. Por eso toca investigar un poco de ese país, para tener una imagen más clara del lugar donde nos representarán nuestros compatriotas en noviembre.

El nombre oficial del país es Reino Hachemita de Jordania, geográficamente se ubica en la región de Oriente Medio (limitando con países como Siria, Irak y Arabia Saudita) y logró su independencia el 25 de mayo de 1946. Nos dobla en población (6 321 000) y su idioma es el árabe.

Sus tierras presentan una extensa historia (que data desde el año 2000 a.C. en la Edad Antigua) y un sinfín de lugares que a simple vista son míticos y maravillosos. Uno de ellos es sin dudas Petra: “no se trata de una ciudad construida con piedra sino, literalmente, excavada y esculpida en tierra”. Forma parte de «Las nuevas siete maravillas del mundo moderno» desde 2007.



Otro de los lugares que impactan a simple vista es el Uadi Rum (o Valle de la Luna), un valle desértico ubicado al sur de Jordania. Es, a su vez, el uadi —o valle— más largo de aquel país. Este peculiar sitio ha sido habitado desde la prehistoria, y actualmente es el hogar de los beduinos de la tribu Zalabia. A su vez, ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.



La capital.

Amán es la capital de Jordania y será allí donde Uruguay dispute el partido del repechaje. Además es el centro comercial, industrial y administrativo. Se estima que su población es similar a los dos millones de habitantes. Las áreas residenciales se han ido expandiendo hacia las colinas circundantes. Disfruten de esta panorámica de la ciudad.



Situado en la capital jordana, el Estadio Internacional de Amán será el escenario que albergará el partido ante la Celeste el próximo 13 de noviembre. Además de ser la casa de la Nashama —nombre utilizado por los fanáticos para referirse a la Selección—, es utilizado por dos equipos de la liga: Al-Faisaly Amman (club más laureado del país con 32 ligas y 16 copas; viste de celeste) y Shabab Al Ordon Qadisiya.



Para cerrar esta entrada informativa, que pretende ser, aunque sea, un pequeño flash del país asiático más allá del fútbol, me parece importante mencionar que Jordania nunca ha ido a un mundial. Y si tenemos en cuenta las actualidades de ambos países, los jugadores con que cuentan, Uruguay será claramente el favorito de la serie ante la Nashama.

25 oct 2013

Sub 17: La primera fase de Uruguay

La selección uruguaya disputó sus tres partidos de la fase de grupo con rendimientos que ilusionan. Si bien Nueva Zelanda, a priori, podía resultar ser un rival sensiblemente más débil, tanto Italia como Costa de Marfil son equipos interesantes que tienen recursos como para dar batalla a lo largo del Mundial.

VS NUEVA ZELANDA. Como dije anteriormente, el equipo oceánico parecía ser el más flojo del grupo y los hechos terminaron confirmando esa premisa: perdió los tres partidos. Sinceramente no puedo extenderme demasiado, ni imaginar cómo se dieron los partidos frente a Italia y Costa de Marfil, pero Uruguay lo vapuleó anotándole siete goles.

En este partido, siendo además el debut de los celestes en la cita mundialista, hubieron varios jugadores que sorprendieron con su nivel (porque no los conocía) y otros que ratificaron lo hecho en el Sudamericano. Leandro Otormín, futbolista de Nacional, no jugó el pre-mundial y hoy entendemos por qué el entrenador uruguayo Fabián Coito lo seleccionó a pesar de ello. Condiciones le sobran: manejo de pelota, explosión y facilidad para regatear.

Otro de los tricolores presentes es Marcio Benítez, un futbolista con un físico bastante potente para la categoría que tiene la particularidad de poder jugar en cualquier posición ofensiva: contra la banda, a la altura del armador, o unos metros más adelante, cerca del área. Marcio sabe definir y asistir, cosas que lo convierten en una pieza clave dentro de la estructura de Uruguay.

Después están Kevin Méndez (posiblemente sea el de más talento y a veces peca de individualista; es difícil criticarle, es su manera de jugar), Franco Acosta (se ganó la titularidad en el Sudamericano; tiene velocidad, mucha, y además está bastante certero a la hora de definir) y Franco Pizzichillo (de lo mejor que ha mostrado Uruguay; ha jugado como mediocentro, pero tiene todo para jugar de “10” y lo ha hecho algunos minutos), entre otros.

VS COSTA DE MARFIL. Posiblemente este fue el partido más duro de la primera fase. Los africanos lograron imponerse en base a su intensidad y, en muchos casos, al físico privilegiado que tienen. Llegaron además a la ventaja tras un rechazo fallido de Joel Bregonis (otro de los tricolores de Uruguay). A partir de aquí Uruguay pareció tener otra actitud (al igual que los africanos) y fue pudiendo lograr hacerse de la pelota y jugar.

Gracias a la insistencia durante el segundo tiempo, y algún cambio que permitió darle más fuerza al equipo, Uruguay llega al empate (diría que de manera merecida) en una acción fortuita tras un par de rechazos y desinteligencias en el área marfileña. Franco Acosta, el rápido atacante proveniente de Fénix, fue el encargado de sellar el empate en un partido que olía a derrota. Aquí vale destacar a Pizzichillo los minutos que jugó más adelantado y las ganas que trajo desde el banco Gonzalo Latorre.

VS ITALIA. Gracias al partido ante los africanos, y para darle un poco de descanso a Franco Acosta, Latorre fue titular ante los italianos. Le dio al equipo su fuerza y sus ganas desde el minuto cero. Uruguay parecía ir inclinando la balanza a su favor, llegando una y otra vez, pero fueron los italianos quienes marcaron el primer gol del partido. Los celestes, que jugaron de blanco, no se resignaron y en la intensa búsqueda llegaron al empate.

De este partido me parece justo destacar al arquero italiano Simone Scuffet. Mostró unas habilidades impresionantes (reflejos y agilidad) para evacuar las continuas llegadas de los uruguayos. En sus manos estuvieron gran parte de las posibilidades de la azzurra.

Finalmente, mediante un disparo seco, Marcio Benítez venció a Scuffet y colocó la ventaja para Uruguay. El partido se iría con el 2 a 1 en el marcador. Así se llegó, tras dos victorias y un empate, al primer puesto del Grupo B.

Con los partidos que se han hecho y viendo algunos rivales de otros grupos, da como para ilusionarse. Uruguay tiene jugadores y fundamento en su juego como para dar pelea y estar definiendo este Mundial Sub-17. Ojalá que en los próximos enfrentamientos evitemos a los africanos (posiblemente, desde el aspecto físico, los más duros).

23 oct 2013

Nuestra prensa especializada

A veces resulta poco creíble que en este país exista la prensa especializada. Digo esto porque al escuchar a periodistas que viven de ello parece que “analizan” como si fueran el dueño del bar de la esquina o un simple cliente de ese mismo bar —o de otro, para el caso da igual—.

Analizan, a falta de un mejor término, con demasiada poca profundidad, por no decir directamente que lo hacen sin profundidad; por arriba, como tanteando lo general de la cuestión, sin ir un poco más allá.

De lo que va del Apertura, es evidente que la cosa no ha cambiado, por eso la presente entrada. Frases como “si Nacional juega mal, gana; si juega bien, golea”, “X equipo aguantó muy bien” cuando en realidad fue quien propuso, se repiten, de una u otra manera, casi de manera sistemática. Pero no nos quedemos aquí, entremos un poco más.

¿No resulta extremadamente arbitrario decir que un equipo juega bien o mal? Aquí se excluyen las formas, porque no hay una receta mágica ni la habrá nunca. Pero hay ciertas cosas que rompen los ojos. ¿Cómo puede decirse que Nacional juega mal si en seis de los siete partidos que ha jugado ha ganado y con propiedad? Y creo que las últimas dos palabras son la parte esencial: «con propiedad».

El conjunto tricolor marcha en la punta del Apertura, pero al margen de esto, en sus seis victorias hizo más que el rival. Fue quien buscó siempre, sin tener en cuenta si el equipo que tenía enfrente optaba por atacarlo o resguardarse y contragolpear. Es claro que siempre existe un mínimo de sorpresa, de azar, es inherente al fútbol, inherente, diría yo, a toda actividad donde interactúen personas o grupos de personas. Pero esas cosas casuales no pueden justificar una seguidilla de victorias como estas; no pueden justificar que Nacional haya recibido pocos goles.

Si entramos al juego del equipo tricolor, es cierto que puede y debe mejorar. Pero siendo sincero, se puede vislumbrar cierto progreso. Ese ganar ‘con propiedad’ ha ido creciendo.

La segunda cuestión que no quiero pasar por alto es el último partido entre Miramar Misiones y Danubio. Por las palabras finales del comentarista pareciera que Danubio mereció marcar dos goles más de los que hizo y que Miramar a duras penas cosechó el empate. Y la cosa no es así, no fue así. Miramar no “aguantó” los noventa minutos. De hecho, fue quien impuso el ritmo en el primer tiempo con la pelota, jugando, asociándose y siendo, por varios momentos, superior al conjunto de la franja. Al parecer el equipo local no pudo aguantar el mismo ritmo con el que había empezado, y fue perdiendo el protagonismo. Una cosa es eso y otra demasiado distinta fue lo que se dijo. Para colmo, el empate danubiano llega por una acción de esas donde hay un cabezazo en el área y la defensa queda descolocada en la segunda jugada.

Y lo último que escuché hoy fue que hablaban de los presupuestos de los equipos que lideran o tienen más chances. Nacional, River Plate y Danubio son los candidatos, tras siete fechas, de los que ‘más saben de fútbol’ en nuestro país. Según ellos, Nacional presenta una ventaja con respecto a los otros dos y Danubio tiene más recursos que River. Es extraño que ahora se hable de esto, ya que hay otro equipo grande en el Uruguay que, teniendo recursos como Nacional, está doce puntos más abajo, con tan solo una victoria y tres empates. Entonces no logro entender qué adjetivo o qué término definen a ese equipo.

Esto ha sido todo por hoy. Hasta la próxima.

17 oct 2013

Sobre la selección mayor

Uruguay jugaba el último partido de las Eliminatorias sabiendo que tenía la obligación moral de vencer a Argentina, que llegaba con muchos suplentes. El resultado final fue bastante ajustado, pero durante los noventa minutos de juego en la cancha se vio otra cosa. Tal vez previsible, pero reconfortante. Había que hacerlo y se hizo; más allá del resultado, de querer seguir adelante, Uruguay tenía que demostrar su nivel y esta Argentina estaba un par de peldaños por debajo.

Cuando se es superior, al menos desde los papeles, hay que demostrarlo en la cancha. Y esto fue lo que consiguió Uruguay. A pesar de esto, hubo ciertos errores o fallas, tanto a la hora de jugar con la pelota como de contrarrestar el potencial visitante.

Lo que más destaco de la Celeste en ese partido del martes por la noche es la actitud. Se jugó para ganar, mentalizados de que había que superar al rival que se tenía delante. Y eso es positivo, o incluso muy positivo, de cara a lo que se viene.

Se viene Jordania; el quinto puesto en las clasificatorias, y el inevitable repechaje, nos hará jugar un ida y vuelta contra el conjunto un tanto exótico (hablando desde la perspectiva futbolística) de Asia. Desde lo previo somos favoritos, incluso más que frente a esta ‘segunda’ Argentina. No me caben dudas de que si se juega con la misma actitud con la que se venció a los albicelestes, estaremos en Brasil el año que viene. Y de ocurrir esto último seríamos cabeza de serie, dato no menor.

Argentina se las ingenió para hacer daño. Lo consiguió en dos ocasiones con sendos remates de Maxi Rodríguez, un futbolista que a pesar de haber vuelto a su país para jugar en el club de sus amores, Newell’s Old Boys de Rosario, tiene nivel y vigencia del fútbol del viejo continente.

Justamente en los goles argentinos, los defensores uruguayos se resbalaron. Es imposible determinar qué hubiera ocurrido si no pasaba ese “percance”, pero analizar con supuestos una realidad sería poco apropiado en este caso. La cuestión es que los goles llegaron, y automáticamente se debe activar la alarma de por qué llegaron y qué se puede hacer para evitarlos; tal vez no tanto pensando en Jordania, rival sensiblemente inferior, pero sí para tener en cuenta en una contienda mundialista.

Lo otro que puede preocupar —o tal vez no, a algunos—, es el juego que se tiene a la hora de tener la pelota. Uruguay carece de juego colectivo elaborado, juego que requiere una asociación de sus futbolistas. Más allá de naturales combinaciones que podrían surgir por inercia en las casuales posiciones de los futbolistas en el campo, habría que aspirar a una idea más ambiciosa.

No veo una intención de combinarse como equipo, veo una intención individual (tal vez ese sea el plan, pero habría que mejorarlo un poco) de Luis Suárez, Cavani o el Cebolla Rodríguez (sobre todo en el último partido), de ser ellos quienes se buscan, de ir contra el mundo, de buscar espacios y tener a dos o tres marcadores encima y aún así continuar buscándose entre ellos. No sé si logro explicarme, porque puede resultar una contradicción.

Es verdad que estos tres futbolistas se buscan, sobre todo Suárez que las pelea todas, aún estando sólo y marcado, y luego busca descarga. Pero esa presunta descarga luego se transforma en otra de características similares (si quien recibió está marcado), o una travesía individual (si está solo quien recibe y avanza unos metros en el campo). No hay dos o tres opciones de pase, y eso es a lo que me refiero cuando hablo de que Uruguay carece de juego colectivo.

No pretendo un 60% o más de posesión, de que juguemos de una banda a otra (aunque no me disgustaría, siempre y cuando se lo haga con un fin). Sí pretendo que más de tres o cuatro jugadores se sientan capaces de tener la pelota en sus pies e interferir en el juego. Por ejemplo, se vio una diferencia con la salida del Ruso Pérez y el ingreso de Gastón Ramírez (sin éste último haber hecho un gran partido); Ramírez cuando se animó, regateó a rivales y generó si se quiere un desequilibrio por el centro que Pérez o Arévalo Ríos (o los cuatro defensores de atrás, tal vez excluyendo a Maxi Pereira), no pueden hacer. Y Ramírez lo hizo. Recuerdo una jugada donde terminan cometiéndole falta. Eso lo destaco como positivo, es un arma a explotar que Uruguay por lo general no tiene o no utiliza al tener otro tipo de jugador en el medio campo.

Y volviendo a lo anterior, es muy destacable la labor que hizo Rodríguez por la banda izquierda, y hasta aplaudible si se quiere, pero eso puntualmente con él, no podemos pretender que haga esas patriadas todos los partidos porque será relativamente fácil para el rival anularlo. No podemos jugarnos ‘a esa’. Además, no en todos los partidos se tiene ese nivel (ni él, ni Cavani, ni Suárez o los demás), y es aquí donde, en los malos días, la selección se reciente demasiado.

Esto no pretende ser un análisis, ni una crónica de Uruguay-Argentina ni tampoco un artículo sobre el repechaje. Es sólo un desahogo que hago a las 01:35 de la madrugada de un jueves. Quería escribir y esto fue lo que salió, torpemente desordenado, algo confuso, pero salió.

Hasta la próxima.

12 oct 2013

Los viajes de Tuf

DE GEORGE R. R. MARTIN

Haviland Tuf es un ser curioso: un mercader independiente de gran corpulencia, calvo y con la piel blanca como el hueso. Es vegetariano, bebe montones de cerveza, come demasiado y le encantan los gatos. Además, es honesto. Tuf logra poseer una enorme nave espacial, el Arca, la única superviviente del antiguo Cuerpo de Ingeniería de la Vieja Tierra. El Arca es un artilugio desaparecido hace más de mil años, pero que revive gracias a Tuf y sus gatos. A lo largo de los siete relatos que conforman este libro, Tuf consigue la nave, la repara y resuelve un sinfín de problemas espaciales con la ayuda de la ingeniería ecológica, una profesión que él recupera y a la que añade la impronta de su personalidad, astucia e ironía.



Probablemente este particular protagonista sea de los personajes que más me han gustado desde que leo libros. Resulta divertido leer cada línea de sus diálogos —que, dicho sea de paso, abundan—, cada charla que mantiene con los demás, o mismo con sus gatos.

Los viajes de Tuf narran justamente eso, los viajes de este particular hombre que mide poco más de dos metros y que tiene una panza abrupta. Nos ubicamos en un tiempo que está por venir, en el futuro, donde viajar de un planeta a otro resulta tan sencillo como ir de un país a otro en nuestra actualidad. Así es como Tuf es invitado, en principio, a guiar a un grupo de personas que han descubierto una nave que parecía ya no existir: el Arca. Esta es la última de su especie y tiene un largo de treinta kilómetros, sensiblemente muy grande en comparación a otras.

Por cuestiones que no precisaré, pues para eso deberían leerlo, Tuf finalmente se hace con el control de la nave y allí comienza la historia que le da nombre al libro: sus viajes.

¿Por qué me interesé en leer este libro de nombre tan particular? La respuesta es sencilla. Quería leer más cosas de George R. R. Martin debido a que Canción de Hielo y Fuego, saga de este autor, me maravilló. No sólo la historia en sí, las tramas o los personajes (que, dicho sea de paso, en su mayoría me fascinaron), sino también la manera en que narra este escritor norteamericano.

Y en Los viajes de Tuf, escrito en 1986, previo a Juego de Tronos (1996), puede apreciarse justamente esa particular manera de narrar. La lectura del libro no se torna aburrida en ningún momento —al menos, como percepción personal—, y en más de una ocasión aparecen respuestas sorprendentes, cosas que no eran evidentes pero con el paso de las líneas van quedando claras o explicadas. El factor sorpresa está presente para sorprender de la nada al lector. Y George R. R. Martin, gracias a su particular personaje, Haviland Tuf, lo logra y con creces.

Para finalizar la entrada debo hacer lo que hago con todo libro porque de lo contrario no sería yo. Esto consiste en darle una calificación del uno al diez al texto del que acabo de hablarles, pero advierto que dicho número sólo es respaldado por mi gusto y no por algún aspecto objetivo. En general me pareció un buen libro o un libro sumamente interesante, y por eso le daré un valor de 8. De más está decir que lo recomiendo, porque me gustó.

Y eso es todo por hoy. Hasta la próxima.